El médico de cabecera, la brújula de la salud en la familia
HC Marbella prioriza este primer contacto con el paciente, con grandes profesionales, para dar un mejor servicio y diagnóstico
El médico de cabecera, o como debe llamarse, el médico de familia, sin duda es la brújula para todo lo que supone la salud en el entorno familiar. En todas las familias, este primer contacto médico-paciente es fundamental para un buen servicio y diagnóstico. Por el hecho de que el médico de familia «toca muchos ámbitos de la Salud y la Medicina», además de su capacidad de trabajo y conocimiento multidisciplinar, los pacientes se sienten muy protegidos y con la mayor de las garantías.
San Pedro Información ha hablado con el director médico de HC Marbella, y uno de los especialistas en medicina familiar con los que cuenta el centro, el Dr. Salvador Álvarez, acerca de esta especialidad, y lo útil que es para el paciente y su ámbito familiar. «El médico de familia es el primer punto de entrada al sistema sanitario, tanto para un chequeo básico, como para una derivación, exploraciones, análisis; recogiendo todo eso en una historia y tomando las decisiones oportunas» -comenta el Dr. Álvarez-, y estableciendo una relación que, en la mayoría de los casos, es de muchos años, entre médico y paciente.
Por el tipo de formación que recibe, el médico de familia «trata todo», rotando en sus años de prácticas por todas las especialidades en centros de salud u hospitales (oftalmología, otorrinolaringología, digestivo, cirugía… hasta pediatría, asistencia a partos…). Por esto, y por la relación que establece con las familias, la relación médico-paciente es siempre muy positiva para todos los miembros de la unidad familiar. «Cuando un médico conoce a las familias, se puede avanzar mucho más en los diagnósticos y curaciones. Sabiendo qué problema tiene, por ejemplo, la mujer; se puede averiguar posibles afecciones con el marido o los hijos, entender cuestiones relacionadas con enfermedades infecciosas, vacunaciones, y cuidar a todos mucho mejor.»
Por otra parte, también tiene una visión global del estado general del paciente, lo que le permite gestionar de forma apropiada los diferentes tratamientos que toma para las diversas patologías que padece. Así, un determinado fármaco podría afectar negativamente a otra enfermedad que pueda tener la persona; el médico de cabecera se asegurará que todos los tratamientos que sigue el paciente sean compatibles unos con otros y seguros para su salud.
El médico de familia puede considerarse como el campamento de base de la salud en la familia. «Un simple dolor de espalda, si no es tratado primero por el médico de familia, puede confundir a los especialistas o a los propios pacientes; dándose el caso de gente que ha ido al nefrólogo por los riñones y sólo padecía un dolor lumbar. El médico de familia debe ser el referente para toda la población y ser alguien en el que se confíe», apunta el Dr. Álvarez.
Unidad de Familia en HC Marbella
En HC Marbella se ha apostado por una Unidad de Medicina Familiar fuerte, que establece un primer contacto de confianza con los pacientes, y cuenta en la actualidad con dos médicos coordinadores. Esto facilita mucho la accesibilidad, y «es raro que un paciente no pueda ser visto en el mismo que día en que pide la cita». Además, hay una continua y fluida comunicación entre ambos coordinadores y el resto de especialistas; facilitando mucho el proceso de los diagnósticos e historias de los pacientes. Esto lleva a que en un mismo día se pueda dar una consulta de familia, derivar a un especialista y realizar una prueba específica; lo que fomenta esa relación tan necesaria médico-paciente, basada en la confianza, la rapidez y la eficacia.