‘Soludable’ crea una guía específica con recomendaciones frente a las quemaduras solares
El ‘Proyecto Soludable’ ha preparado una guía con recomendaciones sobre cómo tratar una quemadura solar en la que también se recoge, qué son, por qué se producen, cuáles son sus manifestaciones clínicas y las principales recomendaciones para su tratamiento una vez que se producen.
En el documento los expertos del equipo ‘Soludable’ recuerdan, además, que la mejor opción de prevención es evitarlas por lo que también insisten en los hábitos saludables frente al sol, recogiendo las principales medidas y consejos de prevención.
La quemadura solar se produce por la reacción aguda de la piel normal frente a la exposición a la luz del sol. Esa inflamación es la respuesta de la piel por su incapacidad de producir más melanina. Es conocido que las radiaciones UV estimulan la síntesis de melanina que, a su vez, es la responsable principal de la pigmentación y el oscurecimiento de la piel. Dependiendo de factores como el fototipo de la persona, la edad o el grado de pigmentación previa, ese límite se alcanza en más o menos tiempo.
Además, la cantidad de las radiaciones UV tiene una relación estrecha con el horario de exposición. La mayor dosis de radiación llega a la tierra entre las 12.00 y 16.00 horas. Asimismo, la latitud y la altura, o el mismo espesor de la capa de ozono, son factores que influyen, ha indicado la Junta en un comunicado.
Son, por tanto, una respuesta de la piel auna sobreexposición solar que puede originar eritema, inflamación, ampollas, exfoliación, pigmentación, fotosensibilidad o inmunosupresión sistémica. Además, la piel tiene memoria por lo que las quemaduras pueden tener efectos crónicos. Esos son, por ejemplo, el fotoenvejecimiento (arrugas), la alteración en la pigmentación o las lesiones del ADN que pueden causar cáncer de piel.
Las manifestaciones clínicas para saber si se está produciendo una quemadura solar son: percibir un intenso enrojecimiento cutáneo y sentimiento de calor. También pueden aparecer vesículas y ampollas. Si se trata de una quemadura más intensa, es posible tener un malestar acompañado por fiebre, mareos o vómito.
Además, como se ha mencionado, el fototipo influye en la gravedad de la quemadura solar. Por eso, las personas de piel clara pueden sufrir peladuras en la zona lesionada. Esa descamación deja ver una piel nueva que es más sensible a las radiaciones ultravioleta en las primeras semanas. Por lo tanto, es imprescindible reforzar la protección en esas zonas.
El equipo de expertos de ‘Soludable’ ha incluido en esta guía todas las recomendaciones para tratar las quemaduras solares, tanto métodos naturales, como fármacos y, además, recogen el resumen de diferentes artículos validados por la comunidad científica que tratan el tema. También recuerdan que es imprescindible ser consciente de que una quemadura solar grave debe consultarse con un especialista para recibir tratamiento médico.