“Hay que tener savia nueva para hacer cosas. He cumplido mi etapa y no concurriré a la presidencia de Apymespa”

Ha estado al frente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de San Pedro (Apymespa) durante seis años, a los que se suma una etapa previa de dos años como vocal. Al frente del colectivo ha tenido que hacer frente a un repentino cambio en el Gobierno local en 2017, con las dudas que supuso; y a la peor crisis económica que ha sufrido el tejido empresarial de la localidad en años tras la irrupción de la pandemia del coronavirus.

Tras el inicio de un 2022 que los empresarios confiaban en que fuera el de la recuperación de la normalidad, la reactivación económica y el regreso de los turistas, el incremento desmesurado de los precios de la energía ha vuelto a sembrar la incertidumbre en el sector. Tras tres mandatos al frente de Apymespa, colectivo desde el cual ha tenido que sortear crisis políticas y económicas, Ana García da un paso al lado y no aspirará en junio a renovar el cargo. Por Carmen Martín Castro.

¿Qué sentimientos tiene en la recta final de su tercer mandato?

Han sido años complicados, difíciles. En este final, tengo un doble sabor, con dos caras. Por un lado, he tomado la decisión de que llego al fin, de dar paso a otro equipo. Creo firmemente en la renovación, en los relevos y hay que tener savia nueva para hacer las cosas. Se ha hecho un buen trabajo, durante años y de forma desinteresada. Por otro lado, no puedo evitar sentirme triste porque se le coge mucho cariño a este trabajo. Ya he cumplido mi etapa y estos dos últimos años han sido muy difíciles. No venía oportuno dar media vuelta en medio de la pandemia, pero ya estamos sacando la cabeza y ya vendrá gente con ganas que tirará del carro.

¿Qué valoración hace de sus seis años como presidenta?

Muy positiva. Apymespa me ha aportado sólo cosas gratas, mucho aprendizaje y mucha parte humana muy buena. Me quedo con las personas con las que he trabajado y conocido. No soy la misma persona que llegó hace seis años. Me ha sumado mucho.

¿La etapa del Covid ha sido la más complicada de gestionar?

Sí, la más difícil. A nivel interno, estos seis años no han sido fáciles. Ha habido que crear una línea de trabajo, una dirección, montar equipos y, en cierta medida, limpiar el concepto que se tenía de Apymespa. No sé si lo he conseguido o no, pero tengo claro que, mientras he estado, a mí no me ha importado el color de quien tenía en frente. Es verdad que no siempre se acierta y que no es fácil estar al frente de una asociación empresarial ante las etapas políticas que nos ha tocado en el Ayuntamiento. Y yo tengo un negocio propio en San Pedro por el que he sido penalizada directamente. Quiero ver a mucha gente en ese pellejo.

¿A qué se refiere cuando dice que había que limpiar el concepto de Apymespa?

Apymes tenía un trabajo y una labor muy buena y era una asociación muy bien organizada. Pero en la etapa en la que yo estuve como vocal, fuimos muy castigados y tachados de ser del PP. Y en esa época llegó a San Pedro, Opción Sampedreña. Yo era una persona que no estaba con nada ni con nadie, venía de otro sector completamente distinto y desvincule a la asociación porque no tenía color político.

¿En qué situación deja el tejido empresarial de San Pedro?

Creo que lo dejo muy cohesionado, muy unido. De las cosas buenas que he conseguido es esa cohesión real. Es cierto que trabajo de cara al público y es muy raro que algún empresario o trabajador autónomo no se haya tomado un café conmigo. Para mí y para ellos ha sido muy fácil quedar, hablar y vernos la cara. Y me han venido a comentar absolutamente todo. Creo que ha sido fácil acceder a mí.

¿Qué proyectos te han quedado por hacer?

Me gustaría mucho que el comercio de San Pedro se apoyara de forma transversal, que se hiciera un centro comercial abierto, que no se fomentara desde el Ayuntamiento ir a las grandes superficies a hacer inauguraciones de monstruos comerciales que se comen al pequeño comerciante. Que, de verdad, se hiciera un apoyo y un centro comercial abierto. Es un proyecto que, en la medida en que he podido, lo he intentado impulsar y retomar una iniciativa que se planteó hace 20 años. Pero requiere de un apoyo muy transversal de los comerciantes, de la asociación, de las delegaciones del Ayuntamiento. Lo que no podemos es que se apoyen a los grandes centros comerciales. No digo que se les dé de lado, pero flaco favor nos hace que nuestros dirigentes hagan inauguraciones de macrotiendas y macrocentros comerciales.

¿Cuáles son, a su juicio, las principales fortalezas de las pymes de San Pedro?

Somos muy emprendedores y tenemos empresas que han pasado de generación en generación, por lo que conocen muy bien cada sector. También tenemos una gran cercanía con el cliente y entre comerciantes, precisamente por esa proximidad. Y esa cohesión tiene muy fuerza y es muy bonita.

¿Cuál es la posición de Apymesa sobre las playas?

Apoyamos a todos los colectivos que reivindican la regeneración de las playas. Pero esto es un poco broma. Soy nacida en San Pedro y nuestras playas han estado así de mal siempre. Siempre. No tenemos playas. Hemos permitido no tener playas. De aquí hacia atrás, todo el mundo ha permitido tener las playas que tenemos. Es vergonzoso, igual que la comunicación transversal en el municipio. Se ha multiplicado la población en Marbella y San Pedro y por eso no nos podemos quedar como nos habíamos quedado. Hay muchas cosas que no se acometen de manera total y con las miras correctas. Vamos parcheando.

¿Y sobre las cámaras de videovigilancia en San Pedro?

Llevo tres años en las comisiones, junto al Comisario de la Policía Nacional, el jefe de la Policía Local o el delegado de Seguridad Ciudadana, en las que se aborda la colocación de estos dispositivos y creo que son las correctas. Siempre se podría hacer de otra forma, pero, por lo que me han transmitido, es que se irá viendo y, en los focos en los que hagan falta, se podrán acometer. Pero, de momento, las zonas en las que se van a poner son correctas.