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OSP, crítico con las cámaras de videovigilancia en San Pedro: «Son escasas. Otras calles también las necesitan»

El concejal de OSP Manuel Osorio ha mostrado este jueves su disconformidad con el número de cámaras de videovigilancia que el Ayuntamiento tiene previsto instalar en San Pedro Alcántara.

El edil de la formación sampedreña ha indicado los tres monitores previstos para garantizar la seguridad en la plaza de La Libertad son escasos y que, a su juicio, otras calles de la localidad necesitan también de estos dispositivos para velar por la tranquilidad de los vecinos, como calle Córdoba, Marqués del Duero o avenida del Mediterráneo. «Son pobres. Trabajaremos para que le resto de las calles que necesitan videovigilancia, la tengan», ha apuntado Osorio que ha denunciado el desagravio que, según él, padece San Pedro respecto a Marbella, que cuenta con monitores en el Paseo Marítimo o en el aparcamiento de un gran centro comercial.

Osorio ha asegurado que el equipo de gobierno se ha visto, a su pesar, forzado a poner las primeras cámaras de videovigilancia en San Pedro tras la presión que, ha asegurado, han ejercido su formación y vecinos de la localidad. «Presentamos una propuesta para pedir las cámaras en San Pedro y el PP votó en contra. Nos pusimos en contacto con los vecinos, entre los que reinaba un enorme malestar ante los casos de reyertas y vandalismos y recogieron hasta 1.000 firmas. Añadimos también un informe en el que el Defensor del Pueblo señalaba que la plaza de La Libertad era un punto negro en el que era más que conveniente poner esas cámaras», ha explicado Osorio.

La alcaldesa, Ángeles Muñoz, y el teniente alcalde de San Pedro, Javier García, anunciaron a mediados de mayo que el Ayuntamiento contaba ya con el permiso del Gobierno central, la Junta de Andalucía y el Tribunal Superior de Justicia andaluz para instalar tres cámaras de videovigilancia en la plaza de La Libertad.

Junto a ellas, se instalarían, en diferentes emplazamientos de la localidad, otras cámaras que prestarían labores de seguridad y de gestión del tráfico, pero no de videovigilancia. De esta forma, la plaza de La Libertad, ubicada en el centro urbano de San Pedro; y el Polígono Industrial de la localidad contarán, antes de final de año o inicios de 2023, con un total de 36 cámaras con diferentes funciones para garantizar la seguridad de los vecinos y mejorar la circulación del tráfico rodado.

Los dispositivos, cuya instalación cuenta con un presupuesto de 720.000 euros, se pondrán en marcha en las fases tres y cuatro de un proyecto con el que mejorar la seguridad en el término municipal y en el que en las dos etapas anteriores se habilitaron cámaras de videovigilancia en diferentes zonas del centro urbano de Marbella y de Puerto Banús.

La plaza de La Libertad contará con tres cámaras con funciones de videovigilancia que pueden adoptar tres posiciones diferentes cada una. Para su instalación en una de las zonas de San Pedro en las que la afluencia de clientes pone en riesgo en ocasiones la convivencia con los vecinos, el Ayuntamiento ha tenido que contar con los informes favorables del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), la Junta y el Gobierno central.

“Salvado el escollo que el TSJA y la Delegación de Gobierno nos hicieron en su día, dado que los nivele de seguridad eran buenos, propusimos los problemas que los vecinos nos hacían llegar en cuestión de convivencia. Se hizo un nuevo informe y ya sí hemos conseguido la autorización de las cámaras en la plaza de La Libertad”, ha señalado el jefe de la Policía Local, Javier Martín.

El entorno del edificio que alberga la Tenencia de Alcaldía, la Villa de San Luis, contará con otras tres cámaras para garantizar la propia seguridad del inmueble. Por su parte, el Polígono Industrial de San Pedro contará con once monitores capacitados para leer las matrículas de coches y motocicletas y distribuidos de forma estratégicas (LPM, Lectores de Placas de Matrículas) y 19 dispositivos para regular la circulación de los vehículos, y que facilitarán a la Policía Local información para hacer previsiones de movilidad de vehículos en las temporadas altas y bajas.

Parte de los lectores de placas de matrículas se ubicarán en el tramo urbano de la carretera de Ronda, cuya gestión ha cedido la Junta al Ayuntamiento en los últimos meses, y la avenida Oriental.