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El PP reprocha al tripartito el abandono de las viviendas sociales y exige mayor atención para el colectivo

El secretario general del PP y concejal del grupo municipal popular, Manolo Cardeña, ha reprochado hoy al equipo de gobierno la situación de abandono en la que se encuentran las viviendas sociales y ha exigido a la delegada del ramo que se ponga a trabajar para paliar esta circunstancia y preste más atención a este colectivo.

Cardeña, que ha mantenido diversas reuniones con los usuarios de las viviendas sociales, ha lamentado la dejadez municipal hacia los inmuebles y la paulatina perdida de servicios que están sufriendo estas familias, y ha exigido una repuesta inmediata para revertir esta situación, que solo se explica desde la indolencia y el desinterés del equipo de gobierno.

El secretario general de los populares ha recordado que los actuales responsables municipales no han renovado el seguro de las viviendas y que han eliminado además los contratos de mantenimiento de los inmuebles, lo que provoca innumerables molestias y perjuicio a los usuarios.

Cardeña se ha referido también a la situación en la que se encuentran las piscinas, que después de varios anuncios por parte de la delegación de su puesta en funcionamiento, lo cierto es que, a mediados de julio, aún no están operativas y los vecinos no pueden disfrutar de las mismas.

“El tripartito tiene que destinar más recursos materiales y humanos para atender a los adjudicatarios de las viviendas sociales”, ha subrayado Cardeña, quien ha censurado que no se actúe en el mantenimiento de los inmuebles y que, por el contrario, se quiera contratar una empresa externa para que realice un diagnóstico de la situación de las viviendas, cuando es un trabajo que habitualmente han venido haciendo los técnicos de la delegación.

El edil del PP ha reclamado a los actuales responsables municipales que mantengan el nivel de servicios y de atención hacia este colectivo que desarrolló el Ejecutivo anterior, cuando se creó la Unidad de Viviendas Sociales, se inició el levantamiento de los embargos que pesaban sobre ellas y se regularizó un alto número de unidades con el reconocimiento de los colonos de El Ángel.

Durante los ocho años anteriores se procedió además a contratar un seguro para las viviendas, además de un servicio de mantenimiento, y se dotó de talleres formativos para sus usuarios, en un apuesta decidida por las familias que allí residen y que necesitan de todo el apoyo y la atención municipal.